Propuestas fiscales en plataformas digitales

Derivado del avance tecnológico que ha habido en las últimas décadas en el país, donde, de acuerdo al Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), en 2018, el valor agregado generado por el comercio electrónico fue equivalente al 5.0% del Producto Interno Bruto (PIB), y más de 58 millones de personas accedieron a contenidos audiovisuales a través de Internet; el ámbito recaudatorio en México asociado a este tipo de prestación de servicios digitales ha tenido que actualizarse frente a proveedores que no son residentes en el país. A raíz de ello, dentro de la propuesta del Paquete Económico para 2020, presentado el pasado 8 de septiembre, se prevén adecuaciones para incrementar el cumplimiento fiscal de los impuestos que se causan en las operaciones de compra y venta de productos y servicios que se realizan a través de Internet, como es el caso de los servicios de transporte y alojamiento temporal, o el de bienes que se comercian a través de plataformas que operan en lo que podría considerarse centros comerciales virtuales. Esto no sería aplicable a todas las plataformas digitales, sino exclusivamente a una categoría de servicios que generalmente son de consumo final para las personas y hogares, como son la descarga o acceso a imágenes, películas, texto, información, video, audio, música, juegos, incluyendo los juegos de azar, así como otros contenidos multimedia, ambientes multijugador, la obtención de tonos de móviles, la visualización de noticias en línea, información sobre el tráfico, pronósticos meteorológicos y estadísticas. En esta categoría también quedan comprendidos los servicios digitales de clubes en línea y páginas de citas, el almacenamiento de datos, así como los de enseñanza a distancia o de exámenes o ejercicios.

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